Ntro. Padre Jesús de

Los Afligidos

Los Afligidos

Carta del Hermano Mayor

Queridos hermanos de nuestro Cristo de los Afligidos:

En esta segunda carta que hago para todos los hermanos que formamos parte de esta familia a la que nuestro Cristo nos ha guiado y llevado a pertenecer, quiero reflexionar sobre este mi primer año de servicio y gobierno a nuestra cofradía como Hermano Mayor.

Lo primero deciros que es un año de descubrimiento, de aprendizaje diario de mucho más trabajo del que se ve por fuera o uno imagina antes de ocupar este cargo. También lo es de responsabilidad, siempre teniendo en la mente y en el corazón: serviros, siendo este el motivo por lo que vosotros mis hermanos de la Presentación al Pueblo me elegisteis, depositasteis vuestra confianza y apoyo. Serviros a todos los hermanos a través de la amabilidad, la rectitud y el cariño.

Por eso mi cargo recibe el nombre de Hermano Mayor, que es quien protege, cuida y sirve a todos los demás hermanos. Deciros que tengo que dar gracias a Nuestro Señor por todo el cariño y respeto que me dais y me transmitís todos los días. Gracias por el equipo que conforma nuestra Junta de Gobierno. Deciros que aunque a veces siente uno el trabajo en forma de escasez de tiempo propio, preocupaciones por las decisiones a adoptar para regir la vida de nuestra hermandad, siento que soy privilegiado por poder guiar a nuestra cofradía en unión con mis hermanos de nuestra Junta de Gobierno. 

En este año que pasa me quedo con todos los proyectos que ya hemos realizado entre todos, me quedo con los momentos gratos que he vivido. Gracias a vosotros me quedo también con los momentos no tan gratos de pequeños roces que gracias a nuestro Cristo que nos convoca, nos une y nos da ejemplo, cansancio físico y mental por la responsabilidad de ser coherentes con nuestro compromiso con vosotros. 

Todo ello me hace aprender y caminar todos los días en unión con todos los hermanos. Como recuerdo gráfico en mi mente me quedo con la sonrisa e ilusión que se muestra en los rostros de nuestro hermanos cuando recibís y os imponéis la medalla de nuestra Hermandad en nuestros Cultos; Esa ilusión al tocar y mirar la medalla, el saber que sienten que forman parte de nuestra familia y posterior jura de los estatutos, me recuerdan dos frases de Nuestro Señor: “Uno para todos nosotros” Juan 15 (9-17) y, “a vosotros os llamo amigos”

El Hermano Mayor

D. José Ángel Cervera Asensio 

Queridos hermanos de nuestro Cristo de los Afligidos:

En esta segunda carta que hago para todos los hermanos que formamos parte de esta familia a la que nuestro Cristo nos ha guiado y llevado a pertenecer, quiero reflexionar sobre este mi primer año de servicio y gobierno a nuestra cofradía como Hermano Mayor.

Lo primero deciros que es un año de descubrimiento, de aprendizaje diario de mucho más trabajo del que se ve por fuera o uno imagina antes de ocupar este cargo. También lo es de responsabilidad, siempre teniendo en la mente y en el corazón: serviros, siendo este el motivo por lo que vosotros mis hermanos de la Presentación al Pueblo me elegisteis, depositasteis vuestra confianza y apoyo. Serviros a todos los hermanos a través de la amabilidad, la rectitud y el cariño.

Por eso mi cargo recibe el nombre de Hermano Mayor, que es quien protege, cuida y sirve a todos los demás hermanos. Deciros que tengo que dar gracias a Nuestro Señor por todo el cariño y respeto que me dais y me transmitís todos los días. Gracias por el equipo que conforma nuestra Junta de Gobierno. Deciros que aunque a veces siente uno el trabajo en forma de escasez de tiempo propio, preocupaciones por las decisiones a adoptar para regir la vida de nuestra hermandad, siento que soy privilegiado por poder guiar a nuestra cofradía en unión con mis hermanos de nuestra Junta de Gobierno. 

En este año que pasa me quedo con todos los proyectos que ya hemos realizado entre todos, me quedo con los momentos gratos que he vivido. Gracias a vosotros me quedo también con los momentos no tan gratos de pequeños roces que gracias a nuestro Cristo que nos convoca, nos une y nos da ejemplo, cansancio físico y mental por la responsabilidad de ser coherentes con nuestro compromiso con vosotros. 

Todo ello me hace aprender y caminar todos los días en unión con todos los hermanos. Como recuerdo gráfico en mi mente me quedo con la sonrisa e ilusión que se muestra en los rostros de nuestro hermanos cuando recibís y os imponéis la medalla de nuestra Hermandad en nuestros Cultos; Esa ilusión al tocar y mirar la medalla, el saber que sienten que forman parte de nuestra familia y posterior jura de los estatutos, me recuerdan dos frases de Nuestro Señor: “Uno para todos nosotros” Juan 15 (9-17) y, “a vosotros os llamo amigos”

El Hermano Mayor

D. José Ángel Cervera Asensio